Los reguladores de voltaje brindan energía estable durante el trabajo en casa

En Latinoamérica, las organizaciones más grandes han definido una reducción en el tamaño de sus oficinas, y más de tres cuartas partes aumentarán la flexibilidad laboral. Esta tendencia de trabajo desde casa, remoto o home office significa para los trabajadores una reducción de tiempo de transporte y la gestión del tiempo para buscar una mejor calidad de vida.

Estas modalidades de trabajo permiten mantener el distanciamiento social y se ha convertido en parte de la nueva normalidad. De acuerdo con los hallazgos del estudio citado previamente, más del 90% de las personas encuestadas manifestaron que no regresarán a la oficina a trabajar tiempo completo. Eso significa que la infraestructura para poder darle continuidad a los negocios a través del trabajo remoto requerirá de varios cambios.

Para poder realizar los trabajos remotamente se necesitan soluciones del Internet de las Cosas (IoT) que funcionen en conjunto y den continuidad a los negocios. Esto quiere decir que se requieren de varias cosas como la nube para almacenar datos, un computador, acceso a internet, aplicaciones que unifiquen escritorios, entre otros. Todo esto requiere de un funcionamiento correcto de la energía y de la menor cantidad de fallas posibles en este aspecto ya que el suministro de energía errático puede ser un gran inconveniente en el hogar y en la oficina. Las fluctuaciones de energía pueden hacer que las luces parpadeen y que los electrodomésticos se apaguen inesperadamente.

Al tener un mayor número de dispositivos conectados en casa es necesario contar con productos que eviten las altas tenciones o sobrecargas de energía que pueden llevar a que ocurran daños irreparables en los equipos”, explicó Roberto Chávez, gerente de Desarrollo de Negocios Transaccionales SAM para Schneider Electric.

Por eso es necesario utilizar productos como los reguladores de voltaje (AVR, por sus siglas en inglés), que se encargan de regular el voltaje a la entrada para poder tener una tensión correcta a la salida hacia las cargas que va a alimentar. “Por ejemplo, a la entrada podemos tener una fluctuación de voltaje de alimentación entre 160 y 284 voltios y, si la tensión fluctúa entre esos niveles a la salida tendremos un nivel de tensión adecuada para alimentar a las cargas; pero si excedemos estos niveles llegan los problemas. Aquí es el regulador tiene cabida para atenuar la tensión alta y amplificar la tensión baja de modo que tengamos un voltaje o potencia adecuado a la salida para los equipos”, agregó el experto.

En el hogar se pueden conectar una impresora, un scanner, una tostadora, una cafetera, un ventilador, una pequeña aspiradora, un pequeño refrigerador, entre otros equipos que no necesariamente requieren autonomía en caso de un apagón o falla eléctrica. Es por eso que Schneider Electric desarrolló los AVR LSW-IND (500 – 1200 – 2000) diseñados para aumentar el bajo voltaje y reducir el alto voltaje a niveles adecuados para sus dispositivos, 148 Joules de protección contra sobretensiones o picos dañinos, y son ideales para sistemas de entretenimiento, PCs y otros dispositivos domésticos.

El regulador abarca un abanico de opciones de alimentación porque no solamente se le pueden conectar cargas críticas, sino también cargas propias del entorno del hogar, con diferentes tipos de enchufe o clavija. Por lo tanto, es recomendable utilizar un AVR que tiene un tiempo de respuesta rápido ante desviaciones de voltaje que se vayan a dar de los umbrales mínimos y máximos descritos. “Esta es una solución ad hoc, con precio adecuado para las cargas electrónicas en casa o aquellos equipos anexos a los sistemas críticos que al apagarse pueden incurrir en la pérdida de la información”, concluyó Chávez.

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