Por primera vez, este procesador rompe la barrera de los 100 qubits, un gran paso adelante en el roadmap de IBM para alcanzar la ventaja cuántica. En pocas palabras, Eagle tendrá la capacidad de superar significativamente y resolver problemas que una computadora clásica no puede.
La ¨ventaja cuántica¨ es el punto en que las computadoras cuánticas pueden comenzar a abordar los problemas más difíciles de nuestro mundo de formas más rápidas, más económicas o más precisas de hoy: desde la creación de materiales más sostenibles hasta el descubrimiento acelerado de nuevos candidatos para el desarrollo de medicamentos y vacunas.
El año pasado, IBM dijo que alcanzaría la ventaja cuántica en 2023. Con este nuevo lanzamiento, la compañía demuestra que está en el camino para alcanzar ese objetivo, que ninguna otra organización o sistema cuántico ha logrado todavía.
Esta herramienta ya ha alcanzado un hito importante: no puede ser replicado por una computadora clásica. De hecho, el número de bits clásicos necesarios para representar un estado cuántico del nuevo procesador es mayor que el número de átomos de los más de 7.500 millones de personas de la Tierra. Con 127 qubits, la compañía lleva más allá del territorio accesible para las computadoras clásicas.
También se destaca un diseño de vista previa del IBM Quantum System Two, que albergará la próxima generación de sistemas cuánticos.
Este sistema permitirá que varios procesadores se conecten juntos para aprovechar una tremenda potencia computacional, y será capaz de albergar los próximos procesadores cuánticos de 433 qubit, 1.121 qubit e incluso más grandes que transformarán las bases de la resolución de problemas para prácticamente todas las industrias: desde la coordinación de la logística de una cadena de suministro global hasta el diseño de baterías más eficientes.
A medida que IBM continúa escalando sus procesadores, se espera que maduren más allá de la infraestructura de IBM Quantum System One. Por eso, la compañía está entusiasmada en presentar un concepto para el futuro de los sistemas de computación cuántica: IBM Quantum System Two, diseñado para trabajar con los próximos procesadores IBM de 433 qubits y 1.121 qubits.
“ Ofrece un vistazo al futuro centro de datos de computación cuántica, donde la modularidad y la flexibilidad de la infraestructura del sistema serán clave para el escalado continuo”, aseguró el Dr. Jay Gambetta, IBM Fellow and VP of Quantum Computing. "System Two, se basa en la larga herencia de la companía, tanto en computación cuántica como clásica, aportando nuevas innovaciones en todos los niveles del stack tecnológico.
El concepto de modularidad es fundamental en IBM Quantum System Two. A medida que IBM avanza en su roadmap de hardware y construye procesadores con recuentos más grandes de qubits, es vital que el hardware de control tenga la flexibilidad y los recursos necesarios para escalar. Estos recursos incluyen la electrónica de control, que permite a los usuarios manipular los qubits, y el enfriamiento criogénico, que mantiene los qubits a una temperatura lo suficientemente baja para que sus propiedades cuánticas se manifiesten.
El diseño de IBM Quantum System Two incorporará una nueva generación de electrónica de control de qubits escalable, junto con componentes criogénicos y cableado de mayor densidad.
Además, esta herramienta introduce una nueva plataforma criogénica, diseñada en conjunto con Bluefors, que presenta un diseño estructural novedoso e innovador para maximizar el espacio para el hardware de soporte requerido por procesadores más grandes, mientras que asegura que los ingenieros puedan acceder fácilmente al hardware y realizar mantenimiento. Brinda la posibilidad de proporcionar un espacio de trabajo criogénico compartido más grande, lo que conduce a la potencial vinculación de múltiples procesadores cuánticos.
Se espera que el prototipo esté en funcionamiento en 2023.